Los ojos están propensos a ser lesionados frente a golpes, caídas y
objetos extraños. Si esto no ocurre con más frecuencia es por las
características anatómicas de la cara, sobretodo cejas y nariz, las que
delimitan un espacio de protección para los globos oculares.
Estadisticamante la posibilidad de sufrir un accidente que involucre el
ojo es de 1 en 10000 y la posibilidad de perder visión a raíz de un
accidente es de uno en 100000. Sin embargo hay actividades que aumentan
el riesgo de lesionarse, como: la carpintería, la mecánica, la
soldadura; o la práctica de algunos deportes como el tenis, el squash,
el fútbol, o someterse a algunos procesos como teñirse el pelo o usar
lentes de contacto. Estudios clínicos en Estados Unidos establecieron
que el 12% de las lesiones graves de los ojos se asocian a prácticas
deportivas, y son mucho más frecuentes en niños y jóvenes.
¿Qué puedo hacer para no tener un accidente? la primera medida es
siempre la prevención, por ejemplo cuando uso un taladro, pinto o clavo
un clavo debo usar antiparras de seguridad. Cuando esquío en la nieve,
navego o hago footing en verano, debo usar anteojos con los filtros
ultravioletas adecuados. Los cristales de estos anteojos deben ser de
policarbonato ya que es importante la resistencia a impactos, y para que
protejan en actividades como squash, o paintball, deben tener un grosor
de al menos tres mms. El uso de antiparras de seguridad es obligatorio
cuando los jovenes manipulan armas de balines. Otra causa prevenible de
accidentes es evitar acumular gotas y colirios ya que no es infrecuente
que gotas oticas o espasmolíticas terminen en los ojos por error,
agravando un traumatismo previo, y si estas gotas están además
contaminadas las consecuencias pueden ser muy importantes.
Si ya se produjo el accidente lo primero es no perder la calma, por
ningún motivo se frote el ojo con las manos, y si es un niño trate de
calmarlo y de evitar que se lleve las manos a los ojos. Lo siguiente es
identificar la causa del traumatismo, si el origen de la lesión está en
un golpe y el párpado sangra profusamente siéntese o siente al paciente
y con una gasa presione suavemente el párpado, las arterias de los
párpados son muy delgadas y no se requiere mucha presión para que dejen
de sangrar. No trate de examinar el ojo ya que si este está dañado puede
empeorar las cosas, por lo que lleve al paciente lo antes posible a un
servicio o clínica con urgencias oftalmológicas. Si el párpado no sangra
pero el ojo no ve, ve borrroso, o duele, evite usar gotas o masajes,
cierre el ojo lo más suavemente posible y encamínese al servicio más
cercano. Si en cambio la causa del traumatismo es un líquido, por
ejemplo cloro, o un gas, lave el ojo profusamente con agua de la llave
por varios minutos, administre un calmante como paracetamol, y
encaminase a un servicio de oftalmología. En estos
traumatismos ,llamados causticaciones, lo más importante es un lavado
precoz y profuso con agua de la llave por varios minutos.
El trauma ocular como todos los accidentes, puede ser prevenido, y si
a pesar de todo, ocurre, un tratamiento adecuado y oportuno puede salvar
la visión del ojo.
Un caso especial son las personas que por diferentes razones
perdieron la visión de uno de sus ojos. Estas personas deben extremar
las medidas de prevención ya que un traumatismo puede significar la
ceguera.
Su oftalmólogo puede aconsejarlo sobre las medidas más adecuadas en
su caso.